Cali, 12 de agosto – 2010 (OP).
Intervención de la Ministra de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín, en la LXVI Asamblea General Ordinaria de Afiliados de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia, ANDI:
Llegamos al gobierno con una prioridad en política exterior con profundas implicaciones en la economía y política local. Recomponer la relación con Venezuela bajo unos parámetros claros donde la seguridad del país no dejará de ser la prioridad.
La reunión del martes en Santa Marta entre el Presidente Santos y el Presidente Chávez marcó un inicio en este camino.
Yo sé que hay –en algunos– escepticismo, incredulidad y desconfianza.
Objetivamente no les puedo dar elementos para que piensen que esta vez sí será diferente. Solo les digo que estoy convencida que con respeto, con una comunicación franca y directa, buscando sentar las bases de una relación estable y duradera, se puede construir un marco institucional que permita dar más seguridad tanto fronteriza como comercial y económica.
Con el restablecimiento de las relaciones, se acordó una declaración de principios que guiará la relación con base en un diálogo transparente, directo, respetuoso, privilegiando la vía diplomática y respetando los principios del derecho internacional.
La creación del mecanismo de cooperación y de las comisiones sectoriales busca agilidad y efectividad para dar soluciones y resultados, a corto plazo.
La próxima semana tendremos la primera reunión de Cancilleres y Ministros para poner en marcha estos acuerdos y le pediremos a algunos empresarios que nos acompañen para examinar el tema de la deuda.
Aunque lo conseguido es un logro significativo, no somos triunfalistas. Para mí, el éxito vendrá cuando tengamos resultados concretos y mecanismos funcionando y solucionando los problemas de seguridad y de los exportadores, así como avanzando en proyectos sociales y de infraestructura. Este ha sido un primer acercamiento entre los presidentes, que nos servirá para comenzar a atender los retos que tenemos en el camino y así afianzar la promoción de nuestros intereses nacionales.
El desarrollo de proyectos fronterizos haciendo énfasis en lo social beneficiará a poblaciones de ambos lados de la frontera. Soy una convencida que dando bienestar social las condiciones donde la criminalidad florece son menos propicias.
Mi otra gran prioridad es sin duda la relación con Ecuador. La creación de confianza es un imperativo, sólo ella nos permitirá dialogar y dar solución a los temas de interés común. Me enfocaré así mismo, en construir una relación de largo plazo, sobre bases firmes y perdurables, de mutuo beneficio, como solo pueden ser las relaciones con un país fronterizo.
En el tema de seguridad, en el último tiempo, hemos trabajado con las autoridades de manera eficiente prevaleciendo la coordinación entre las fuerzas militares. Esto ha sido muy positivo. Sin embargo, yo aspiraría en un futuro cercano que en las relaciones con los vecinos la seguridad no fuera el tema central. Me encanta compartir esta mesa con Ministro Rodrigo Rivera, pero espero que en un futuro las relaciones exteriores y de defensa no estén juntas.
El desarrollo fronterizo con proyectos sociales que atiendan las necesidades apremiantes de la población será un eje fundamental de estos nuevos escenarios.
Para lograrlo, debemos construir una metodología en donde las comunidades, los gobiernos locales y el gobierno nacional definan los proyectos que efectivamente contribuyan a mejorar la calidad de vida de los habitantes.
Y ahí la alianza con el sector privado es fundamental. Yo los invito a trabajar en este tema de responsabilidad social en la frontera donde por años sus habitantes han estado abandonados.
En algunos días visitaré la frontera con el Ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador y acompañados de otros Ministros, haremos una evaluación de las necesidades para comenzar a formular y ejecutar proyectos de gran impacto social y económico.
Creemos que con este esfuerzo en la frontera se reducirá la tensión histórica que ha marcado la relación bilateral.
La diplomacia que conduciré se regirá por la prudencia, el respeto, la cooperación, la transparencia y el pragmatismo. Buscaré la diversificación geográfica y temática para promover los intereses de la nación y para abrir oportunidades para ustedes, inversionistas, industriales, empresarios de nuestro país.
Tenemos grandes capacidades nacionales y debemos entender que ya podemos enfocarnos en temas como la innovación, la ciencia, la tecnología, las industrias creativas o las alianzas estratégicas.
Para el Presidente Santos el ingreso a la OCDE es una prioridad y trabajaremos con el Ministerio de Comercio para lograrlo. Así mismo, la educación de calidad, el cambio climático y las oportunidades económicas generadas del medio ambiente son temas relevantes que debemos promover.
No desconocemos nuestro compromiso con temas que han colmado la agenda en las últimas décadas como el secuestro, el narcotráfico, el terrorismo y todas las formas del crimen organizado. Dicho compromiso sigue siendo firme y esencial. Los hechos de hoy en Bogotá no nos harán cambiar la ruta trazada.
En el mismo sentido, el tema de los derechos humanos ha irrumpido en prácticamente todas las manifestaciones internacionales del país. Nuestro compromiso con su defensa y promoción, con el respeto a la vida, a la libertad y a la integridad de las personas es indeclinable. Nace de nuestra propia convicción.
La defensa de los casos ante la Corte Internacional de Justicia continuará siendo un tema fundamental en nuestra agenda.
Sin embargo, estamos convencidos que el país ha superado con creces estas problemáticas en los últimos años. Por eso, llegó la hora para diversificar nuestra política exterior e incidir en los temas que hoy importan en el sistema internacional.
Seguiremos acompañando al Ministerio de Comercio en la estrategia de negociación de tratados de libre comercio, de protección de inversiones y de doble tributación, para incrementar el acceso a los mercados y a los flujos de inversión del mundo.
Estamos convencidos que pueden contribuir a incrementar el comercio y la inversión en nuestro país, fundamentales para la generación de empleo y de estabilidad para industriales y empresarios en el largo plazo.
Es hora de mostrar la otra cara de Colombia. La cara de lo que ustedes representan: prosperidad, emprendimiento, creatividad y oportunidades.
Así, pondremos en marcha una política exterior moderna que mire hacia el futuro, con presencia en los diversos escenarios multilaterales y bilaterales, estableciendo propósitos, donde el apoyo que les daremos es una prioridad.
Llegó la hora de afianzar alianzas e identificar oportunidades mediante el respeto de las diferencias, el diálogo y la cooperación.
América Latina y el Caribe es nuestra región de interacción natural. Con ella podemos afianzar vínculos económicos, comerciales y políticos. Queremos trabajar con toda la región reconociendo las diferencias en cuanto a las visiones de país que cada uno tiene.
Por lo tanto, podemos dentro de los mecanismos de integración tradicionales, trabajar para responder a las necesidades de nuestras poblaciones.
En la región, Haití se convierte en una prioridad de solidaridad y apoyo a su recuperación política, económica y social. Estamos convencidos que debemos estar más presentes y ayudar a movilizar a la región para el bienestar del pueblo haitiano.
Me gustaría que en un futuro cercano pudiéramos concertar una ayuda público-privada en algún proyecto de impacto social, donde Colombia deje su impronta en ese país necesitado.
Existen otras modalidades de concertación. Aquellas que le permiten a los gobernantes encontrarse en torno a intereses y objetivos puntuales vinculando de manera más eficiente a los sectores privados y empresariales.
Esta diplomacia flexible, creativa e innovadora favorece nuestras políticas en regiones hasta ahora lejanas.
En este sentido, México, Perú y Chile, nuestros socios del ARCO PACÍFICO LATINOAMERICANO, serán aliados para fortalecer nuestras capacidades y abrir mercados en un espacio de 200 millones de habitantes. Si logramos una asociación real con los países del ARCO mejoraremos nuestro acceso a las corrientes económicas y financieras del Asia Pacífico, incluyendo a foros como APEC.
Independientemente de que logremos formar parte de éste en un futuro cercano, con la importante iniciativa del empresario colombiano, podemos ser más activos en estas economías que crecen y se modernizan.
Conozco y he trabajado con el sector privado; me comprometo a escucharlos y a aprender de sus experiencias, para tomar medidas diplomáticas que mejoren nuestras capacidades de acceso, intercambio e iniciativas en estos países.
Colombia lanzó la Estrategia del Asia Pacífico en la cual la ANDI ha hecho una contribución fundamental. Voy a fortalecer este mecanismo de diálogo con los empresarios que nos permitirá afinar la estrategia para cumplir metas en el corto plazo.
Así como el Foro del ARCO puede traer grandes oportunidades para el país, creo que el acercamiento con naciones de características similares en otras partes del mundo, es un imperativo. En este sentido, el nuevo grupo que ha ido tomando fuerza en las grandes corrientes económicas, puede ser un escenario que nos permita ampliar nuestras perspectivas de desarrollo. Colombia, Indonesia, Vietnam, Egipto, Turquía y Sudáfrica, los ahora llamados CIVETS, atraen la atención de analistas e inversionistas en el mundo.
Los CIVETS reúnen una población de 600 millones de habitantes y tasas de crecimiento proyectadas en un promedio de 4.5% en los próximos 10 años. Comienzan a percibirse como las nuevas economías emergentes que así como los BRICs (Brasil, Rusia, India y China) merecen atención e interés.
Debemos aprovechar estas nuevas alianzas para lograr un mayor acercamiento político y afianzar el ingreso a los flujos de inversión mundiales. La búsqueda de oportunidades nos permitirá fortalecer nuestras políticas de erradicación de la pobreza y generación de empleo. Iniciaremos un acercamiento con estos países para identificar sus potenciales.
Y es acá donde concebimos una Cancillería dinámica y acorde con estas nuevas realidades. Me comprometo que iremos al mismo ritmo de estos cambios que se perfilan en el sistema internacional.
Con China, India y Rusia, las relaciones diplomáticas son buenas, pero tenemos que profundizar las relaciones económicas. Es decir, ya tenemos un camino recorrido y podemos fortalecer los encuentros empresariales y de inversión buscando beneficios de largo plazo. Son países donde la alianza pública y privada es fundamental, y estamos listos a trabajar en lo que nos corresponda como gobierno.
Europa, Canadá y Estados Unidos han sido nuestros socios y aliados tradicionales. Continuaremos fortaleciendo las agendas con temas que beneficien nuestro crecimiento y desarrollo.
La cercanía con estos países no es incompatible con la diversificación de nuestras relaciones internacionales.
De ahí que las iniciativas en Latinoamérica y en Asia Pacífico no afectarán los lazos profundos que tenemos con estas naciones industrializadas. Lo que sí haremos es ampliar las agendas con temas como inversión, energías alternativas, innovación, ciencia, tecnología, cambio climático. Los trabajaremos con autonomía e independencia, para ampliar nuestras opciones de diálogo y cooperación con estos países.
Me siento agradecida y orgullosa de hacer parte del equipo de gobierno del Presidente Santos. Compartimos su sueño.
El sueño de llegar al final del “gobierno al frente de un país seguro, con una población educada y trabajando, con una infraestructura que nos permita competir mundialmente, para llevar la producción, el ingenio y la laboriosidad de los colombianos a todos los rincones del mundo.”
Mil gracias.
María Ángela Holguín
Ministra de Relaciones Exteriores